
¿Cómo perpetuar las empresas familiares en España?
¿QUÉ ES UNA EMPRESA FAMILIAR?
Para comenzar, se va a explicar en qué consiste una empresa familiar, ya que mucha gente desconoce los tres requisitos mínimos que estas tienen que cumplir para denominarse empresas familiares. En primer lugar, la familia en cuestión tiene que poseer el negocio. En segundo lugar, la familia tiene que desempeñar labores ejecutivas y directivas. Y por último, tiene que existir una vocación de continuidad en el tiempo para que la empresa pueda obtener el rango de empresa familiar.
IMPORTANCIA DE LAS EMPRESAS FAMILIARES EN EL PAÍS
En nuestro país, estas empresas suponen casi el 90% de las empresas, por los que son fundamentales para nuestra economía aglutinando el 60% de la actividad económica y el empleo español.
Sin embargo, a pesar de que tiene que haber una vocación de continuidad en el tiempo, existen múltiples estudios que afirman que tan solo el 40% de las empresas familiares sobrevive hasta la segunda generación. Lo más preocupante tiene que ver con las que sobreviven hasta la tercera, ya que se ven reducidas a un 15% de las que comenzaron.
PROBLEMAS A LOS QUE SE ENFRENTAN LAS EMPRESAS FAMILIARES
Hay que tener en cuenta, que las empresas – por el mero hecho de ser una empresa – cuentan con muchos factores o motivos de disolución inherentes a su naturaleza, como podrían ser la falta de financiación, la pérdida de competitividad, el desfase de sus productos o servicios por una falta de adaptación a los tiempos, etc. Sin embargo, las empresas familiares se enfrentan a dos tipos de problemas: los problemas inherentes a cualquier empresa y los problemas derivados de los conflictos familiares.
Por ello no suelen contar con altas tasas de continuidad. En muchos casos, es complicado afrontar el traspaso de poderes entre generaciones sin que el negocio se vea fuertemente afectado. También están presentes otros conflictos familiares, que son bastante habituales y vienen, en mayor medida, determinados por una ausencia o insuficiencia de planificación.
CONFLICTOS FAMILIARES HABITUALES
Los conflictos más habituales en las empresas de este tipo suelen estar relacionados con la sucesión en los puestos de alta dirección, la contratación y retribución de miembros de la familia, la distribución de los dividendos y las ampliaciones de capital.
PROTOCOLO FAMILIAR: ¿QUÉ ES? Y ¿QUÉ BUSCA?
Por ello, el protocolo familiar es un tema importante y de mucha actualidad que tiene como finalidad la minimización de los conflictos así como la clara mejora del funcionamiento de este tipo de empresas.
Un protocolo familiar es un instrumento que tiene como fin último la ampliación de las posibilidades de las relaciones entre la propiedad la gestión del negocio. Es un acuerdo que aglutina normas y códigos de conducta que todos los miembros de la familia deberán cumplir en caso de tener la voluntad de continuar en el negocio. De este modo, se profesionaliza la gestión del negocio y se plantea una manera de trabajar, gestionar, desarrollar y organizar la empresa de mutuo acuerdo entre todos los integrantes de antemano.
Todo ello busca mantener unida la empresa y profesionalizar las actuaciones de la familia con el fin de que todos los miembros actúen de manera conjunta para alcanzar los objetivos previstos y garantizar el correcto futuro desarrollo de la compañía.
PARTES DEL PROTOCOLO FAMILIAR
- Valores de la familia y empresa
- Órganos de la empresa:
- Consejo de administración: encargado de tomar las decisiones de mayor importancia dentro de la empresa.
- Consejo de familia: órgano encargado de velar por la existencia de la simbiosis entre los intereses de la familia y la gestión óptima empresarial.
- Comité de nombramientos y retribuciones: encargado de contratar y retribuir a los miembros de la familia que trabajan en la empresa. Este comité se encarga de elaborar las propuestas y enviarlas al Consejo de familia, que es el encargado de tomar las decisiones finales.
- Oficina de familia: órgano encargado de la gestión de las finanzas y el patrimonio de todos los miembros.
- Normas de funcionamiento: se encargan de la regulación de la toma de decisiones, políticas principales, decisiones sobre dividendos, gestión de conflictos, sucesión, etc.)
- Planificación de la sucesión en puestos de dirección: la buena gestión de la sucesión de los líderes empresariales es una de las claves fundamentales para determinar el éxito de las empresas a futuro.
- Decisión de los miembros de la familia que pueden formar parte de la empresa: se tiende a opinar que un exceso de familiares dentro de la empresa dificultará la atracción y la retención del talento externo. Por ello, conviene que los familiares que trabajan en la empresa cumplan determinadas condiciones como una titulación académica y una experiencia adecuada al puesto que ejercerán, una necesidad por parte de la empresa de contar con alguien de ese perfil, cierta experiencia en otras empresas no relacionadas con la familiar… Por último, conviene destacar que el Consejo de Familia tiene que aprobar por unanimidad la inclusión de un cónyuge de algún miembro de la empresa a la misma, ya que no es recomendable que esto ocurra y puede perjudicar seriamente a la compañía.
PROCESO DE ELABORACIÓN DEL PROTOCOLO FAMILIAR
El primer paso es realizar entrevistas con los miembros de la familia y con el equipo directivo.
En segundo lugar, se van detallando y redactando las diferentes partes del protocolo anteriormente mencionadas.
A continuación, se aprueba el documento.
Por último (no en todos los casos) se recurre al notario para realizar una escritura pública ante él.
CONSEJOS PARA LA ELABORACIÓN DEL PROTOCOLO
Como consejo se propone preparar el protocolo cuando quedan pocos años para que la siguiente generación entre a formar parte de la compañía o cuando la empresa es propiedad de los hermanos. No conviene descuidar ni a la familia por los negocios ni a los negocios por la familia, por lo que la redacción de estos protocolos es fundamental para la mejora del clima y la reducción de conflictos que pueden afectar a la continuidad de la empresa.
Conviene en muchos casos contar con la experiencia de profesionales que pueden actuar como mediadores y comentar los puntos que a los que no son expertos en la materia les podrían pasar por alto.